Advertencia

Este blog NO es el blog del Médico Juan - Ignacio Reculé Rivera. Si usted busca a ese facultativo, puede encontrarlo AQUÍ.

6 de marzo de 2011


La banda me chupa un huevo, 
pero la pregunta sigue siendo muy buena y muy válida.

¿Destruirías algo perfecto para hacerlo hermoso?

Y mucho más inquietante,
¿Destruirías algo hermoso para hacerlo perfecto?

No. Preferiría contentarme con contemplar la posibilidad.
Y lo segundo lo he hecho; me gustaría no volver a hacerlo jamás.
Pero está redactado en subjuntivo por algo.

5 de marzo de 2011

Oh, qué maravilloso sería...

...resucitarlos a todos con esferas del dragón, pasarles sintetizadores y guitarras eléctricas.
Por ahora, Bach Punk.

Ecuación

Toma todas las horas que tengo que estudiar cosas que no me interesan, luego las que tengo que trabajar en cosas que no me motivan, en horarios que me alienan,
pero toma luego todas las horas de relaciones fundamentales, de cosas que disfrutas, de beneficios que gozas,

pero ahora toma todas las horas que un curado de calle pasa con frío, solo, con pena,
y al final mira todo el tiempo que pasa ido, escapado, en un mundo de alcohol donde nada molesta y todo es risas.

A veces no sé quién la hizo mejor, dude,
pero como dijo un personaje de una película,
i chose life,

así que sumo horas y minutos de cosas gloriosas, y sólo de vez en cuando, con alcohol.

Los últimos 112 se los debo a Scott Pilgrim vs. The World, película que realmente recomiendo.
(Mi cinefilia del último tiempo está siendo alimentada por los muchachos de Insomnia, thankyouverymuch guys)

4 de marzo de 2011

Axones


Entonces yo soy la Comisura Colosal.

Grant Morrison's The Invisibles
Nuestros cerebros dialogan y construyen no siempre al unísono. Quizá (bah, eso es pura retórica, por supuesto que era así) a esto se referían los antiguos. Ten Ten Vilú y Cai Cai Vilú, Vishnú y Sivá, Barroco y Clásico, you choose, todos hablaron en algún momento de la dualidad, el collage que crea y destruye y enfrenta para crear. Pero si vas atrás, bien atrás, te acuerdas que al principio era el dios y la diosa, las dos caras del Dios, y como en un diagrama de Venn místico la intersección era el hombre, hecho para formar la bestia con dos espaldas, hecho de dualidad para ser la reunión. Los primeros cristianos lo sabían, todos lo sabíamos pero fuimos olvidando.

El cuerpo calloso es la persona; el sitio-milagro donde la bestia y el arquitecto se reúnen y copulan, la Creta donde la belleza y el poder se dejan cubrir por un árbol de hojas perennes. Todo se refleja a sí mismo en esta reunión de dioses que es el propio hombre. La verdad se apunta a sí misma en el foco del lente; el cuerpo calloso es el Forum Magnum.

¿Demasiado color, you say? Estos dos estudios proponen al cuerpo calloso como la estructura cerebral con mayor dimorfismo sexual en el ser humano, siendo en particular la única con mayor tamaño relativo en el segmento femenino (una buena propuesta para explicar por qué no puedo pensar en dos cosas al mismo tiempo, y por qué las mujeres efectivamente parecen tener los dos hemisferios más conectados). Pero este otro fue más lejos, proponiendo que en sus muestras (hombres, mujeres y personas con trastornos de género), el sexo mental estaba más fuertemente predicho por las mediciones de cuerpo calloso que el sexo cromosómico o fenotípico.

Uno es uno y su sistema de relaciones, José; Uno es uno, su Corpus Callosum.
"...More like Meta - Universes, I suppose you'd
call them; They exist on higher scales
"

2 de marzo de 2011

1 de marzo de 2011

Verano Naranja

Bastardo el soneto como este amor
que hoy te profeso y no te confieso,
incompleto las más de las veces;
otras del verso en las heces queda todo el sabor.

¡Constancia! mudo exijo a tu rosa
flor que se agita es la que marchita
luego adorna desechada el barrial;
si has de presumir de especial, has de ser virtuosa.

Pero sé también puta perversa,
gitana dulce haz que mi alma pulse
rítmica al vaivén de tus caderas;
de tus senos las laderas ríndeme conversa.

¡Quiéreme, quiéreme a mí completo!
Aunque sean bastardos, amor y soneto
.

Shakespeare es feo.
Mélanie no.
     Llegó el momento ese del verano en que uno saca cuentas y resume, llenándolo de palabras y lazos e ideas. Words are for those with promises to keep, dice Auden. Consultado el etimológico respecto de resumir, propone que es hijo ni tan bastardo del latín re-sumere, "volver a tomar, comenzar de nuevo". Oh, justo lo que podría uno hacer una vez tras otra con el verano si lo dejaran, las vacaciones infinitas.
     Pero no. Hasta que el doc no ajuste el Condensador de Flujo (Marty!), there's no coming back, pero en cambio como dice William en el soneto quince, As he takes from you, I engraft you new, y eso es lo que tengo que decir del verano, las cosas que he añadido, los elementos que he y me han sumado o restado y que pretendo volver a tomar, repetir.

     Lo que no hice: No me apuré. Por nadie. Anduve lento, pensé lento, me relajé. Parezco un haiku de lo puro soso.

     Lo que otros hicieron por mí: Shakespeare escribió Coriolano. En acertadísima traducción de Ballester:

MENENIO: [...] ¡Oíd! ¡Las trompetas!
VOLUMNIA: Ésos son los ujieres de Marcio. Delante de él marcha el ruido y detrás deja el llanto. La muerte, ese espíritu negro, habita en su brazo nervudo, y cuando lo levanta, ella desciende y mueren los hombres.
     Auden escribió, entre muchas cosas que me cambiaron la sesera:
Looking up at the stars, I know quite well
That, for all they care, I can go to hell,
But on earth indifference is the least
We have to dread from man or beast.

How should we like it were stars to burn
With a passion for us we could not return?
If equal affection cannot be,
Let the more loving one be me.

Admirer as I think I am
Of stars that do not give a damn,
I cannot, now I see them, say
I missed one terribly all day.

Were all stars to disappear or die,
I should learn to look at an empty sky
And feel its total dark sublime,
Though this might take me a little time

     ¿Y qué hice yo para mí? Difícil elegir qué mostrarle al público. Quedémonos con el soneto bastardo a la entrada. Pero JI,
     ¿Qué es eso de Soneto Bastardo?

Sí, es un improvement a mi post.
     Un soneto, según la tradición, son catorce versos (líneas) endecasílabos (once sílabas). No suelen separarse en hemistiquios (mitades de verso autónomas) como en el caso de los alejandrinos (catorce sílabas en dos hemistiquios de siete).
     La manera de repartir estos catorce versos en el espacio nos da los dos tipos de soneto más canónicos:

1) El Soneto Español, muy cultivado durante el Siglo de Oro, distribuye en dos cuartetos con rima consonante abrazada y dos tercetos con rima abrazada, pareada o alterna. Wait wat? Miremos acá:
La violencia contiene la entropía
Dime sino desorden ¿qué es el amor?
Cuerpos que se funden en uno mejor
Eres más tuya cuando eres más mía
     Eso es un cuarteto (cuatro versos); la rima es abrazada porque el primer verso (- entropía) abraza al cuarto (- mía), atrapando a los dos versos interiores (- amor y - mejor). Ese esquema se resume en ABBA (A representa el sonido "-ía", y B el sonido "-or", que son las rimas). Los tercetos pueden repartirse de más formas; CDC EDE (la C y la E están alternas, mientras D abrazada), CDE CDE (en esta, todos los versos están abrazados; cada rima está separada por dos versos), y más escasamente, CCD DEE (pareado).

Más de ella, cómo no.
2) El Soneto Inglés, por haber sido ampliamente cultivado y divulgado en esa nación, y llevado a altas cotas por Shakespeare. Éste sigue un esquema ABAB CDCD EFEF GG; es decir, tres cuartetos alternos ("serventesios") y un dueto final pareado.

     Un soneto bastardo es por tanto aquél que escapa de un modo u otro a estas apretadas reglas, sea por la omisión, modificación, o permutación de ellas.

     ¿Cuál es la bastardía del soneto de más arriba? Primero, hay una bastardía de forma; sus cuartetos son abrazados, pero son tres y tienen como colofón un dueto. Para ampliar más esta bastardía de rima, el modelo ABBA ha sido desfigurado y complejizado, alterándolo a A[bb]C[ca]; en efecto, en vez de cuatro, hay seis palabras de rima consonante por estrofa. Veamos:
Bastardo el soneto como este amor
     -or en el primer verso, es A
que hoy te profeso y no te confieso,
     este verso está divido en dos hemistiquios de cinco sílabas: /que hoy te profeso y/ no te confieso/ que riman entre ellos, haciendo [bb]; pero es aún una rima bastardizada, puesto que al primer hemistiquio se le agrega el sonido parásito de la "y", que se disimula en la pronunciación
incompleto las más de las veces;
     Esto es C
otras del verso en las heces queda todo el sabor.
     Acá se presenta un verso de catorce sílabas dividido en dos hemistiquios de 8 y 6; el primer hemistiquio rima con C (veces y heces), mientras el segundo hemistiquio con A (amor y sabor)
     Esta mañosa fórmula se repite tal cual en los tres cuartetos (¡sinalefa incluida!).

     El lector dado al cómputo habrá notado también que no se cumple con la regla más básica: ¡No hay un solo verso endecasílabo! Sin embargo, por amor a la numerología se conserva rigurosamente la cantidad de 154 sílabas (¿no le cuadra?); se ha removido una sílaba a cada uno de los versos en los cuartetos y se han adicionado al final, quedando 10/10/10/14 (según hemistiquios, 10/5(+1)+5/10/8+6). El dueto final sigue el mismo principio, quedando en 10/12 (10/6+6, que incluso puede ser reducido por repartición de sílabas a 10/2+1+3,2+1+3).


      Este "formalismo de la deformación" le da un saborcito especial a este poema, que yo aprecio mucho. Si usted no, bien puede irse al carajo por iletrado. El análisis de contenido ya lo haré otro día.

28 de febrero de 2011

27 de febrero de 2011

ex nihil, nihil fit

William, 1608, en endecasílabo, blanco e incompleto:
LEAR: ||||||. What can you say, to draw
A third, more opulent than your sisters? Speak.
CORDELIA: Nothing my Lord.
LEAR: Nothing?
CORDELIA: Nothing.
LEAR: Nothing will come of nothing, speak again.
Prieto, 1998, en prosa:
LEAR: ¿qué vas a contestar para recoger un tercer lote, más rico aún que el de tus hermanas? Habla.
CORDELIA: Nada, señor.
LEAR: ¿Nada?
CORDELIA: Nada.
LEAR: De nada sólo puede resultar nada. Hablad de nuevo.
Don Nica, 1990, en libre:
LEAR: Qué puede decir para adjudicarse el tercio
Superior al de sus hermanas.
Tiene la palabra
CORDELIA: Nada mi Lord.
LEAR: Nada?
CORDELIA: Nada.
LEAR: De la nada nada sale. Diga algo.
Reculé, hace dos días, en libre:
Y esta es la doble ponderación
la efigie Gemínida
de las letras
y las reuniones
[de las letras].
                                            He estado entre los más altos
                                            de entre los altos
                                            de los hombres
                        He estado en el bullicio sideral
                        He estado despierto
                        con sal en la boca
                        a punto de aullar

Y he pedido silencio
porque la marea tidal de sonido
no me abarcaba,
no me decía en nada
y he pedido silencio
y ha habido silencio

Y he comenzado a hablar.

El Amor de Micro

[Redacté esto el 26 de Mayo del 2010. Ahí va...]

Yo pensé que todos teníamos uno.

Mientras más lo comento con gente de bata blanca que camina sonriendo por los pasillos (o sea mis colegas compañeros de curso), sorprendo a más gente con el concepto.

Amor de Micro es esa Chica/Muchacho/Anciana/Perro (no juzgo) que te encuentras con razonable frecuencia en el transporte público. Y que te encanta. Que te hace el día un buen día sólo por aparecer ahí.

Ojalá poner una foto de mi amor de micro.
A falta, ahí va una foto bonita robada del internet.

26 de febrero de 2011

Pontypool


Simplemente, ya no recuerdo cuándo escribí prosa por última vez.



Sin embargo, el log documenta que desde ese tiempo entré y salí de una mini-depresión, modifiqué la percepción que tengo de mi futuro académico, reordené los intereses en mi tiempo libre, prácticamente dejé de hablar con la mujer con la que creí que iba a casarme, cambié todos mis autores favoritos, alteré mis hábitos de lectura, de gastos y de estudio en forma radical, y de vida saludable en forma definitivamente no tan radical, decidí algunas cosas que no haré y que sí haré con mi futuro, trastorné profundamente mi evaluación de yo mismo, trastoqué mis suscripciones religiosas, pulí mi concepto de felicidad, renové el sentido de las relaciones en mi vida, y en general, pretty much everything changed, ahora que lo trato de escribir y me doy cuenta que podría seguir y seguir.

Nada que extender acerca de esas fruslerías, en todo caso. Si voy a romper un silencio tan largo, y tan poco forzado como por el contrario, natural y orgánico, tiene que ser por algo que valga la pena.

Vi Pontypool.

No quiero arruinarla con nada, ni tan siquiera con sugerir su género, la construcción delicada de los personajes, el manejo del color en la fotografía, o el uso sublime del sonido. Es magnífica, pero ¿de qué voy a hablar si no la quiero tocar para no arruinársela a usted, señor lector?

¿Ud. escribe, mi amigo? ¿Compone, pinta, saca fotos, filma, hace volantines? ¿Le ha pasado eso que sucede cuando mira el trabajo de alguien más y dice oh dios, no hay nada nuevo bajo el sol? Por supuesto que le ha pasado, si repetimos los mismos temas pensando en un cansancio que en verdad no existe, no los agotamos nunca porque no existe tal cosa, sólo hay el regocijo de ver el mismo poliedro por todas sus caras y a todas las luces; y ud. ve el trabajo de ese otro que también le muerde la galletita a dios para ser co-creador del wooniverso, y sabe que él habla en su mismo lenguaje, en su misma frecuencia; que siente, que le duele y le arde y le quema y le sabe dulce y glorioso eso mismo que a usted lo despierta en la mañana y lo arropa por la noche, mi buen señor, ese tema que le da vueltas a la vida y que, seamos sinceros, usted lo cree también, justifica la existencia del mundo entero.

Eso que le pone todos los sabores a coger el lápiz o el pincel o los palillos a crochet o lo que sea que usemos y luchar contra la hoja, contra el color, contra el espacio mismo, contra nosotros mismos y nuestras condenadas ideas limitadas, y nuestras maravillosas ideas limitadoras, como cercos que rodean y contienen y nombran y nos dan la posesión de eso que nos palpita en el alma, ese lazo que lanzamos en la negrura de lo que no existe aún y vuelve con una criatura fantástica atrapada.

Y no importa que el de al lado pesque a nuestra misma trucha, el mar es grande, es fabuloso e infinito y puede hacernos a todos felices, porque cuando uno le da permiso, la trucha del de al lado brilla igual de linda y salta lo mismo de espontánea, y nos pone en la luminosa y brillante nirvana de la meta-comprensión tal cual.

Eso es Pontypool para mí, con mis temas. Escribí un poema hoy, a las siete y cuarenta y dos de la mañana lo empecé, volviendo de una juerga con mis muchachotes. Podría ser el diálogo final del largometraje. O el largometraje podría ser mi poema. ¿Quién soy entonces?



A veces no importa.