Advertencia

Este blog NO es el blog del Médico Juan - Ignacio Reculé Rivera. Si usted busca a ese facultativo, puede encontrarlo AQUÍ.

30 de junio de 2012

Tyrion Lannister me hizo llorar, sí, es cierto.

26 de junio de 2012

Solitario George


(es altamente relevante leer el artículo con la música puesta. Dele PLAY)

Chelonoidis nigra abingdoni. Tortuguita negra de la isla de Abingdoni. Quelónido es la palabra para designar a las tortugas en general, y es simplemente "tortuga" en griego. Quelon significa duro y rígido. Por la caparazón, claro. Pero es esa misma dura y rígida caparazón la que permitió a las Chelonoidis, originales de África, cruzar el Atlántico, porque pueden flotar cabeza-arriba y son capaces de sobrevivir 6 meses sin comida.

Y del Atlántico a las Galápagos. A la isla de Pinta. A vivir bajo el sol infinito, en la tranquilidad de los pinzones. Pero todo eso duró hasta que alguien trajo a las cabras, y se acabó la comida. En ese estado encontraron a George en 1971. Ya era viejo para ese entonces. Era viejo, y estaba solo. Sin comida, todos los demás habían muerto: solitario George, como se le conoció de ahí en más, era el último.

Fausto Llerena lo cuidó los últimos 40 años. Hasta el 24 de junio del 2012, mañana en que encontró a George muerto. Probablemente con más de 100 años en el cuerpo, su corazón se cansó, como le pasa por igual a tortugas y hombres: la insuficiencia lo mató.

Pero ahora escucha esto: Todos somos Georges. Nacemos acompañados porque al nacer no somos nadie, no somos nada. Pero al final todos somos el último de nosotros mismos y morimos solos.

21 de junio de 2012

Realidad, Estados del Universo, Fuentes de Energía, Think About It

Estimado Lector@: Como es tradición, en los posts largos y con mucho contenido, suelo ambientar con fotos de mujeres hermosas. Sin embargo, en atención a que la mayoría de mis lectores comentantes son féminas (el monoardilla, la Coni, el Leo...), también habrán hombres hermosos. Lo siento. Viva la igualdad.

Intuitivamente, nuestro cerebro cataloga como "reales" todos los elementos manipulables por nuestros dedos. Es rayano en lo tautológico lo que acabo de proponer, puesto que es precisamente a partir de esos elementos de los que el cerebro construye los objetos semánticos y experienciales con los que se construye la percepción, y a través de la percepción, lo "real". Luego está la acumulación de experiencias consistentes tanto con los objetos así diseñados, como con las percepciones que derivamos de ello, que nos motivan a formular - inductivamente - observaciones (leyes) de lo real.

Superada esta etapa, se añade la etapa técnica en que la capacidad perceptual se expande (microscopios, telescopios). La ley para aceptar algo como real en esta etapa es simple extrapolación; si ese algo muy pequeño o muy grande genera cambios observables en el material de suyo real (cosas que me caben en las manos), puedo catalogarlo como real.

Sin embargo, algunos fenómenos permanecen fuera aún del campo de la percepción expandida. Nadie nunca ha visto una corriente eléctrica (Aunque si Nikola lo hubiese dicho, damn boy I'd believe in him). Sin embargo, se la inviste de realidad en la medida que produce cambios observables en la materia que cabe en las manos (enciende ampolletas). Sin embargo la traslación a realidad es acá un poco más quisquillosa, antes de sacarle el mero título de "magia"; le pido una explicación teórica consistente. No es sino una vez que he llevado dicha explicación teórica al campo de la prueba repetida, obteniendo resultados consistentes, e incluso, complejizaciones y teorías derivadas (la corriente eléctrica enciende ampolletas, autos, ciclotrones), que lo acepto como real (Me doy cuenta que los últimos tres párrafos terminan con "real"). 
Solenoide de Tesla. ¿Por qué en este artículo?
Porque todo va mejor con Tesla, bitches.

Llegados a este punto, hay varias maneras diferentes de dudar de la realidad. La más obvia, y qué daré por despreciable dada autoeliminación como argumento, es dudar del proceso de manipulación - percepción. Si vamos a empezar con el cuestionamiento Berkeleyano (originalmente busqué la cita como Berkley, rendered THIS, dear god) y nos preguntamos si no seremos conciencias flotando en un espacio vacío, creando el universo de la nada, podemos dudar de la realidad, claro. Pero no podemos proponer ninguna incidencia tampoco sobre la realidad, so we don't care.

No. La duda más interesante la planteó la física misma durante el siglo XX, justamente en su esfuerzo por buscar esas leyes últimas que permiten definir todo lo real. Pues, claro, puedo decir que la corriente eléctrica es real, enciende la ampolleta, el auto y el acelerador de partículas siguiendo el mismo set de reglas, por lo que las reglas TIENEN que estar correctas... ¿no?

La patada en los cocos que significa la ecuación de Schrödinger es fundamentalmente ésta, en términos pedestres: ¿Qué pasaría si esas observaciones consistentes de la realidad no fuesen producto de la causalidad (y por tanto, clausura del mundo físico como sistema determinístico cerrado), si no de la casualidad? Es cierto, son 2000 millones de años de observación consistente los que han permitido la vida [sin embargo, las sucesivas extinciones que se han visto se verían neatly explained por cambios en las leyes físicas, ¿no?]. Pero mientras más nos acercamos a las fundaciones de lo que consideramos "la materia", el más patente de los estados "reales", más sugerente se hace que todo el set de reglas determinísticas con el que trabajamos se deriva de un montón de resultados observacionales que dependieron de sucesos probabilísticos, no determinísticos. Da la suerte que son probabilidades fuertemente tendientes al 0 o al 1, lo que permite construir ciencias enteras alrededor, pero no deja de ser probabilidad, bitches.

Lo podemos explicar así: si tiras una moneda al aire una sola vez, las conclusiones que puedas sacar si sale cara (como por ejemplo: cada vez que una moneda se lanza al aire, sale cara) valen hongo. Si la tiras al aire 40000 veces, ya podemos empezar a hablar. Sin embargo, la realidad se parece más bien a una moneda que tiene una carga pesada en la cruz, y por eso siempre sale cara. Las 40000 veces que hemos tirado la moneda, efectivamente resulta cara, por lo que hemos podido sacar conclusiones operacionales que parecieran emular reglas determinísticas (es decir, que dado el set de condiciones inicial, SIEMPRE repite el mismo resultado, A siempre lleva a B). Sin embargo, en cualquier momento puede salir la cruz.
Piénsalo. Imagina que la taza de café de pronto se va hasta el techo. Que de pronto, los electrones atraen protones y todo se convierte en una reacción nuclear gigantesca. Todo parece apuntar que más que determinista, nos movemos en un universo probabilista, y que en consiguiente, las leyes físicas no son más que un estado transicional para describir al universo, un maquillaje más que la piel verdadera.

Los corolarios de esto son, por supuesto infinitos. Popper (jaja, no, mentira, este Popper)se ocupa de comentar (no muy a mi gusto, pero lo hace, en las primeras partes de The Self And Its Mind. No encontré el texto del libro disponible, pero aquí hay una recensión del Opus) de cómo esto implica que el método reduccionista de abordaje para el universo es un método bueno para trabajar, pero inadecuado para explicar, y por lo tanto la frontera lingüística a elaborar está en aceptar la existencia de las propiedades emergentes de las interacciones entre procesos como impredecibles, en vez del determinismo que venimos aceptando hasta ahora. Eso, en castizo, es holy shit, puede que no existan los fantasmas, el ayurveda, el psi, y muchas otras cosas, pero, si existen... pueden ser explicadas por propiedades emergentes. El mundo está loco, hermano, todo se puede. Además, al fin le puedo dar un asidero a la teoría personal que tengo de que las reglas físicas son transientes, y corresponden a una descripción del universo aplicable al ambiente local, pero que no tienen necesariamente validez en otros lugares. There, lo saqué de mi pecho.

Sin embargo, todo este post iba a ser sobre ciencia ficción, porque cada vez que pienso en todo esto me viene a la mente lo mismo:

Lo que sucede es que en verdad todo el universo es un bloque fijo y constante de materia, como un mar de Dirac pero de toda la materia, la materia es una cosa espesa, inatomizable, no hay tal cosa como protones y electrones ni neutrones ni neutrinos ni muones ni no bullshit, el universo es continuo, thick as a brick. Lo que pasa es que nosotros somos parcialmente sensibles (no estoy hablando de concientes, mierda, esto es otra cosa sustancialmente diferente). Si no lo puedes percibir, blam, no está allí, sus propiedades no te afectan, y estamos inmersos en este mar, aislados del resto del mar por este set de leyes físicas. La gravedad es en verdad el roce de la materia consigo misma. Y surge una disciplina de la física que intenta estudiar este set de procesos con los que la materia que conocemos no interactúa, que es la física de procesos no interactuantes, de la que se deriva primero la tecnología para generar sistemas aislados a la perfección, desligados del set de leyes conocidas; mini universos. Luego, se deriva la energía de roce, obtenida a partir de forzar procesos aislados a interactuar, generando cantidades obscenas de energía.

El libro sería más o menos así. Y como cita introductoria tendría:

“Se podría decir, pues, que los resultados de la física moderna sugieren que deberíamos abandonar la idea de una substancia o esencia. Sugieren que no hay una entidad idéntica a sí misma que persista a lo largo de todos los cambios en el tiempo [...] Ahora el universo se nos aparece no como una colección de cosas, sino como un conjunto interactuante de sucesos o procesos” 
- Sir Karl Popper .
Damn, si tuviera la energía para escribirlo. 


Mentí. Simplemente, no se veía bien.

19 de junio de 2012

La Ciudad de Día

Ayer, después de años, me tocó deambular por Valparaíso a la hora en que se vacían los colegios de sus escolares. Recordé que Valparaíso puede ser un lugar con sonrisas; un lugar vivo, palpitante, joven, lleno de texturas y pieles y ojos sanos, y nuevos.

Una persona desconocida me saludó en la calle.

Aprendí que Enoch, al ser ascendido a los cielos por YHWH, fue elevado al ángel Metatrón (holy take that name, biteches!), escriba de los cielos, y único que puede estar sentado en la presencia.

weón, un buen día.

Espero realmente que sea una mala persona, de lo contrario, fuck the world.

Also, this:

Internet has come full circle.

18 de junio de 2012

Hyper Fantasia

Ser un magnate ruso y tener dos esclavas gemelas para obligarlas a hacerse maestras del Arpa y hacerlas tocar adaptaciones de rock clásico en mi mansión, para mis huéspedes destacados.
Esto es más severamente alienante que cualquier cosa que se le pueda ocurrir a Lynch, o las microescenas de El Resplandor, o lo que quieran. Esto es la humanidad mostrando sus más retorcidas y obscuras callejuelas.


17 de junio de 2012

One Art

The art of losing isn't hard to master;
so many things seem filled with the intent
to be lost that their loss is no disaster,

Lose something every day. Accept the fluster
of lost door keys, the hour badly spent.
The art of losing isn't hard to master.

Then practice losing farther, losing faster:
places, and names, and where it was you meant
to travel. None of these will bring disaster.

I lost my mother's watch. And look! my last, or
next-to-last, of three beloved houses went.
The art of losing isn't hard to master.

I lost two cities, lovely ones. And, vaster,
some realms I owned, two rivers, a continent.
I miss them, but it wasn't a disaster.

- Even losing you (the joking voice, a gesture
I love) I shan't have lied. It's evident
the art of losing's not too hard to master
though it may look like (Write it!) like a disaster.




-Elizabeth Bishop

16 de junio de 2012


So, Louis' got a problem with me.